¿Cómo saber si mi hijo necesita lentes? (Oftalmólogo pediátrico)

Lentes o anteojos son necesarios para problemas de visión pero para los niños, a veces, se vuelve complicado que los usen…

Es importante que estés atento a las señales que podrían indicar que tu hijo tiene problemas de visión, ya que estos no siempre se detectan en los exámenes de la vista. Deberás prestar especial atención si alguno de los padres del niño utiliza anteojos (recuerda que la falta de visión es hereditaria), si tu hijo tiene problemas de aprendizaje, o sobre todo, si eres padre de un bebé.

¿Cómo puedo notar que mi hijo tiene problemas de visión?

Si un niño tiene problemas en la escuela, podría ser causa de un problema de visión no detectado.

Síntomas a tener presente…

Si notas que tu pequeño presenta los siguientes síntomas, talvez sea momento de actuar. Recuerda que cuanto antes se detecte un problema, se podrá combatir con mayor eficacia:

Se frota los ojos

Frotarse los ojos podría ser un signo de fatiga ocular y éste puede ser síntoma de cualquier tipo de problema visual.

Hace bizcos

Esto suele ocurrir si los pequeños se acercan demasiado las cosas para verlas, hacer bizcos probablemente les ayude a enfocar mejor, pero solo es señal de una mala visión.

Inclina la cabeza

Éste puede ser signo de desequilibrio del músculo ocular o de estrabismo. Si un niño con este problema, mira en una determinada dirección puede estar viendo doble, al inclinar la cabeza, esto podría reducirse un poco.

Lagrimeo excesivo

Existe una condición llamada ophtalmus lag, que hace que los párpados no se cierren completamente durante el sueño, esto ocasiona que los ojos se sequen, y al despertar resulta en un lagrimeo abundante, provocando problemas de visión.

Ve la televisión demasiado cerca

Esto podría ser señal de miopía, ya que ésta genera una visión clara en un rango cercano, y una mala visión a distancias lejanas.

Se pierde durante la lectura

Si mientras está leyendo se salta renglones o pierde de vista el punto en el que se encontraba, probablemente sea sinónimo de astigmatismo o un problema de los músculos oculares.

Se cubre un ojo para leer o ver la televisión

Cuando un niño se cubre un ojo, lo hace porque no puede ver adecuadamente con éste, hacerlo le permite ver bien con el otro ojo sin que la mala visión interfiera.

Dolores de cabeza frecuentes

Un niño con mala visión hará un esfuerzo adicional para corregir su vista borrosa, lo que ocasiona dolores de cabeza o dolores frontales en la frente.

¿Qué debo hacer?

Los niños no siempre pueden decir lo que les molesta, y con dificultad podrán responder las preguntas que tú o que el médico le realicen. Es recomendable que consultes a un oftalmólogo pediatra, ya que estos, además de tener paciencia con los pequeños, cuentan con equipos especiales para niños.

Es recomendable que los bebés tengan su primer examen de la vista a los seis meses de edad.

Si se trata de un bebé ¿cómo puedo saberlo?

Podrás darte cuenta si observas alguno de los síntomas anteriores, pero si no estás seguro (que es lo más común) llévalo con un oftalmólogo pediatra, éste utilizará un instrumento llamado retinoscopio, una lámpara de mano especial que se utiliza para ver el “reflejo rojo” (las pupilas rojizas que se ven en las fotografías tomadas con flash en la noche).

Mediante este reflejo rojo a través del retinoscopio, el médico podrá observar si hay alguna anomalía y podrá prescribir lentes con precisión suficiente.

¿Cómo es el examen de la vista para niños?

Existen pruebas diseñadas especialmente para bebés y niños pequeños, y para niños mayores normalmente se aplica el mismo examen que a un adulto.

El plástico es el material ideal para los lentes de un niño, ya que éstos son más ligeros y más seguros que el vidrio.

¿Qué tipo de lentes debe usar?

Los lentes recomendados para niños son aquellos hechos de policarbonato (inastillables) y comúnmente también, los que cuenten con protección U.V para bloquear los rayos del sol.

¿Los niños aceptan tener que usar anteojos?

Los niños con problemas de visión más graves, generalmente estarán felices de usar una herramienta que les permita ver adecuadamente, pero si se trata de problemas menos agudos, probablemente el niño requerirá varias semanas para acostumbrarse.

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